- Para tomar decisiones autónomas y responsables en torno a nuestra sexualidad.
- Para tener conocimiento de cuáles son las opciones que tenemos para cuidarnos.
- Para hacer que se garanticen nuestros derechos de acceso a la salud sexual y reproductiva.
- Para poder vivir libres de prejuicios y violencia.
¡Necesitamos contar con información de calidad y accesible!
Eso quiere decir por un lado, que se nos debe brindar información explicada de manera clara para que sea comprensible por cualquiera (¡más allá de si tiene o no discapacidad!), y por otro, que las y los profesionales de la salud deben prestar a las persona con discapacidad la misma atención que a las demás personas.
¡La información es un derecho humano!
¡Que sea accesible y de calidad es una responsabilidad de toda la sociedad!
¡Viraliza el compromiso!
¡Tú también puedes derribar barreras!